{-Narra Pilar-}
Hablábamos y reíamos Liam, Louis, Zayn y yo en el sofá. Yo también
comencé a bostezar. Zayn se dio cuenta.
-
Vamos a dormir si quieres. – Me dijo. Yo asentí
terminando de bostezar. Nos despedimos de todos los chicos y subimos a la
habitación. Íbamos subiendo las escaleras al mismo ritmo con los pies. Entramos
en su habitación, era grande con una cama de matrimonio, bastante acogedora. Me
senté en el bordillo de la cama.
-
¿Y el pijama para mí?
-
¿Quién dijo que vayas a ponerte pijama? – Se fue
acercando más a mí y empezó a besarme echándome hacia atrás. No ponía ninguna
resistencia, pues es algo que me enloquecía. Nos dejamos llevar por la pasión.
Fuimos poco a poco quitándonos el uno al otro la ropa, con suavidad, sin dejar
de besarnos en ningún momento. Sentíamos nuestros cuerpos unido, hundiéndose el
uno en el otro. No estaba acostumbrada a esta sensación. Le paré contándole que
era mi primera vez, algo cortada. Sonrió y continuó haciéndolo con más pasión y
cuidado. Alguna vez tenía que llegar el momento y me encantaba la idea de que
fuera con él. Antes de empezar nada serio abrió un cajón de su mesilla sacando
de él un preservativo. Todo era muy bonito. Al terminar nos tumbamos boca
arriba.
-
Entonces. ¿Ha sido tu primera vez? – Decía con
una sonrisa en la cara. - ¿Conmigo?
-
Pues no ves que sí, tonto. – Reímos. Mis
mejillas ya estaban de un color carmesí. – Tú serás el primero y el último. –
Dicho esto volvimos a unir nuestros cuerpos y labios quedándonos dormidos
abrazados.
A la mañana siguiente me desperté notando a alguien en mi espalda. Me
estaba besando en ella. Me giré bruscamente. Era Zayn, me había asustado.
-
¿Qué haces? – Decía medio dormida.
-
Despertándote a besos. – Subió hasta llegar a mi
mejilla. – Buenos días. – Me susurró al oído. Me hizo estremecer. - ¿Cómo has
pasado la noche?
-
La mejor noche de mi vida. – Le besé. Acto
seguido me levanté en dirección a la puerta.
-
¿A dónde vas así? – Dijo medio gritando. Puse
cara rara y miré mi cuerpo. Reí. Estaba desnuda. Me puse el vestido de ayer. Vi
a Isa que salía de la habitación de Niall. Me miro con cara de impresión, esta
vez no estaba desnuda no sé por qué me miraba con esa cara.
-
Tienes el vestido del revés. – Esta mañana no
daba una. Bajamos juntas hasta la cocina donde estaba Louis tomando café.
Primero dimos los buenos días a Louis.
-
Venga, zanahorio, invítame a uno. – Dije sentándome
en la silla junto a la mesa y haciendo como si esperara a que me trajeran el
desayuno. Se levantó y fue a preparar dos cafés más sin rechistar. Terminó.
-
Tomad, mandonas. – Nos los puso en la mesa. Noté
como alguien me daba un beso en la mejilla. No había otro que con un beso me
hiciera sentir tanto, Zayn. – Que feliz se te ve hoy. – Se refirió a él.
-
¿Te callas? – Le dio un pequeño golpe a Louis.
-
Y ahora de mala hostia. – Reímos. Zayn se
incorporó con nosotros en la mesa, poniéndose a mi lado. Apareció Harry
corriendo porque había quedado con Ann, y parecía que llegara tarde. Poco a poco
fueron bajando todos, el último fue Niall. El más dormilón.
-
Podríamos darnos un baño en la piscina, luego. –
Habló Niall.
-
Vosotros proponed, que nosotras no llevamos
nada. – Dije refiriéndome a la ropa.
-
Tampoco nos sigue importando. – Habló Louis
pícaro. No tiene arreglo. Estallamos en carcajadas.
Terminamos de desayunar. Subí de nuevo a la habitación de Zayn. Una vez
allí, me quité lo que llevaba y comencé
a buscar entre sus cajones alguna camiseta. Oí el sonido de la puerta al
abrir, pero no le di importancia. Noté la presencia de alguien y me di la
vuelta para saber quien era.
-
¿Me estás robando? – Era Zayn. Pues menos mal
que no había sido ninguno de los otros, estaba en ropa interior.
-
Estoy intentando robar una camiseta. Si es tan
amable. ¿Me podría decir dónde encontrar una? – Decía con voz seria pero a la
vez juguetona.
-
Menuda ladrona más guapa. – Vino hacia mí cogiéndome
de la cintura y pegándome a él. - ¿Y si no quiero?
-
No pasa nada, me verán así todos y ya. – Reí. Me
observó de arriba abajo, se mordió el labio inferior y me solto para ir a coger
una camiseta. Cogió una gris, ancha. Olía a él. Le di un beso rápido y me fui
al baño a peinarme. Vino detrás. Cruzamos nuestras miradas en el espejo. – Deja
de seguirme. – Cogí un cepillo y comencé a cepillarme el pelo.
-
Me gusta mirarte. – Me cogió de la cintura por
detrás. Juntó su cara con la mía. Nos mirábamos en el espejo. – Te quiero. –
Sonreímos y comenzó a besarme por el cuello.
-
Y yo. Zayn… - Dije mientras un cosquilleo pasaba
por mi cuerpo. - ¿Me dejas peinarme? – Se separó y me soltó quedándose en la
puerta. Me hice una coleta alta. Terminé. - ¿Bajamos? – Me dirijí a él.
-
Si la señorita está lista, claro. – Salimos del
baño y bajamos las escaleras. Anduvimos por todo el patio hasta llegar al
trasero donde estaba la piscina. Me senté en una hamaca quedándose delante de
mí, pensaba que se iba a sentar pero se agachó robándome un beso. Me cogió en
peso. Seguíamos besándonos. No me di cuenta de que estábamos moviéndonos hasta
que…
-
¡Zayn! – Pude decir antes de caer al agua
empapándome. - ¡Te odio!
-
¿Tú no eras la que me quería?
-
Ven que te lo diga al oído. – El inocente se
acercó. Le cogí de la camiseta rozándole los labios y le empujé hacia mí
tirándole al agua.
{-Narra Niall-}
Había pasado una de las mejores noches de mi vida, más bien la mejor,
junto a ella. Olía a ella. Había dormido entre sus brazos, y os aseguro que en
estos momentos me siento la persona más afortunada del mundo por tenerla. No
quiero pensar en adelante y ver que solo van a estar poco más de un mes y medio
aquí. El hecho de perderla y no volverla a ver, me destroza. El día llegará en
algún momento, quiera o no, pero no quiero pensar en eso, ahora quiero disfrutar
de lo que nos queda por vivir juntos y que esto sea algo que recuerde toda mi
vida. Sus labios, su sabor, son perfectos. Todo en sí, con sus defectos e
imperfecciones, es perfecto. No sabéis todo lo que llevo esperando a alguien
que me hiciera sentir así, tan especial.
Habíamos terminado de desayunar, Pilar y Zayn habían subido arriba. Nosotros,
al contrario, nos fuimos al salón. Me senté en un sofá de los tres que había.
Isa se tiró encima de mí cogiéndome del pelo y besándome. Mis manos fueron a
parar en su parte trasera, la cual deseaba tocar como fuera.
-
¡Por favor, dejad eso para la noche! – Oí decir
a Louis con las manos tapándose los ojos. Nos separamos y reímos. Sobre ese
tema, tendríamos que hablar. Sé que tengo dieciocho años y además he estado con
algunas chicas, pero ninguna me ha llenado lo suficiente como para llegar a tal
punto. Y soy de esos que me gusta que mi primera vez sea con alguien que
realmente amo. Y tenía curiosidad por saber si ella tampoco lo había hecho
ninguna vez.
-
¿Estás bien? – Me dijo ella sacándome de mis
pensamientos y volviendo al mundo real.
-
¿Estás tú aquí? – Le pregunte obteniendo un sí
por su parte. – Entonces, sí. – Le besé en la nariz. Cosa que siempre me gusta
hacer. Tocaron al timbre. Louis fue corriendo a abrir la puerta. Eso no puede
significar otra cosa que, Eleanor.
{-Narra Pilar-}
Zayn venía hacia mí nadando, pero yo me escapé saliendo de la piscina.
Se acercó al bordillo saltando y saliendo, también, de la piscina. Fue
echándome hacia atrás, hasta salir corriendo alrededor de la piscina. Él iba detrás
de mí, huía de él como podía. En un momento de despiste, tropecé y caí. No
parábamos de reír. Paró en frente mío hiperventilando del agotamiento.
-
¿Estás bien? – Decía entre risas cortadas.
-
Sí, pero mi culo no. – Me ayudó a levantarme. Me
froté el culo en señal de dolor.
- Trae que lo cure. – Dijo haciendo el hadan de tocármelo. Yo me aparté
bromista. Reímos aún más fuerte. Oíamos voces.
-
¡Enana! – Era Louis desde el cristal que
comunicaba el jardín con la casa. Detrás de él había una chica, tímida, no
paraba de mirar al suelo. Zayn y yo nos acercamos. – Eleanor esta es Pilar. –
Dijo señalándome, refiriéndose a la chica. – Pilar esta es Eleanor. – Hizo lo
mismo pero a la inversa. Era ella, su novio, por fin me la presentaba. Por lo
que me había contado de ella me caía bastante bien y sentía mucha curiosidad en
conocerla. Parecía dulce y sensible, aparte de tímida.
-
Encantada. – Le di dos besos. Ella respondió con
un igualmente cortante.
-
¿Os lo habéis pasado bien, no? – Dijo refiriéndose
a que estaba empapada. Todo gracias al simpático de Zayn. Lo cierto es que me
había divertido. - ¿Traigo algo? – Asentí. Ellos dos entraron, mientras Eleanor
y yo nos quedamos fuera conociéndonos mejor. Que maja era, me caía aún más
genial ahora. Nos tumbamos cada una en una hamaca esperándolos. Oímos un golpe.
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